Algunos estudios controlados y aleatorizados, bien diseñados han sido conducidos para evaluar la efectividad de diferentes estrategias intervencionales en la conducta y muchos concluyen que tales intervenciones resultan en la disminución de la toma de rirsgos sexuales y, en algunos estudios, y en la incidencia de VIH y enfermedades de transmisión sexual. Intervenciones en la conducta para prevenir infección por VIH incluye educación básica acerca del VIH - que es la infección VIH y SIDA; la historia natural de la infección VIH, incluyendo una fase prolongada asintomática; cómo se transmite VIH; cómo la transmisión puede ser prevenida. Sin embargo, conocimiento no es suficiente para motivar un cambio. A los individuos se les deberá ayudar a reconocer sus riesgos personales y motivar un cambio. Barreras a la reducción de riesgos deberán ser identificadas y estrategias desarrolladas para sobrepasarlas. Con esas variables en mente, y un plan individualizado de reducción del riesgo por el individuo y el asesor.